sábado, 9 de noviembre de 2013

Berazategui se vistió de verde

  En las angostísimas calles  del partido de Berazategui conseguir estacionamiento fue una verdadera travesía, autos por doquier y una cantidad exorbitante de gazebos donde se vendían productos artesanales y orgánicos, artesanías, frutas, verduras y todo tipo de artículos no industriales, cubrían la entrada de la ExpoFeria Nacional de la Sustentabilidad que se llevó a cabo desde el día 7 al 10 de Noviembre en la Municipalidad de Berazategui (provincia de Buenos Aires) en el Centro de Actividades Roberto De Vicenzo, de 10 a 21 hs. con entrada libre y gratuita.

  Un grupo interdisciplinario de profesionales, académicos, empresarios y referentes de ONGs vinculados con las distintas expresiones de la sustentabilidad; el cocinero, escritor, conductor de televisión y ex-jugador de handball Martiniano Molina; y el conductor de televisión, empresario y periodista Rubén Mundel, fueron los impulsores y organizadores de esta ExpoFeria. La misma se realizó con el objetivo de “realizar un aporte al proceso de desarrollo económico y social argentino en el marco de la sustentabilidad; generar  un espacio de encuentro en el que se comuniquen e intercambien conocimientos, saberes, voluntades y compromisos ante los desafíos que supone transitar hacia un desarrollo económico y social sustentable; contribuir a la formación de redes entre empresas, organizaciones y gobiernos cuyas acciones tengan como principios la sustentabilidad reconociendo la diversidad de posturas  y las oportunidades que conllevan; conocer sobre la producción orgánica, desarrollos tecnológicos, industriales, y culturales con la intención de contribuir a la mejora de las condiciones de vida humana y el cuidado del planeta.”

  La entrada  al salón principal, que abarcaba un Auditorio y un Gimnasio, no se distinguía… eran tantos los gazebos que cubrían la vereda del Centro de Actividades  que uno quedaba algo mareado pero, previendo esta situación, un numeroso grupo de organizadores con remeras azules y unas credenciales colgando del cuello  se encargaban de evacuar las dudas de los transeúntes desorientados.  Al ingresar al salón percibí un importante aroma a lo que parecía una mezcla entre café y tierra; había una gran cantidad de expositores de varios productos ubicados de manera desestructurada pero prolija, uno al lado del otro, dejando espacio para que la gente pueda circular cómodamente y  cada uno con una temática propia: aquel que exponía artículos con madera, por ejemplo, tenía su espacio ambientado según su correspondiente actividad, y esto se repetía con cada uno de los expositores.
  Adultos mayores, otros no tan mayores, jóvenes y niños recorrieron la feria; los más “cholulos” persiguieron a Martiniano Molina para sacarse fotos con él o simplemente lo miraron con disimulo y murmuraron con el de al lado; aquellos con hambre pudieron disfrutar tanto de la comida de los gazebos del exterior como de la que se servía adentro, que era vegetariana y costaba entre 20 y 30 pesos el plato.
  Caminando por la feria me encontré con la realización en vivo de vitrofusión: con un soplete empotrado en una mesa una señora rubia de unos 50 años, concentradísima, realizaba canutillos de vidrio para un público de 10 personas aproximadamente, entre ellas un niño de unos 8 años que miraba perplejo el show y le hablaba a su papá de lo increíble que le resultaba el paso de estado sólido a casi líquido del material. También estaban las bicicletas sin pedales, un emprendimiento de un joven de 35 años llamado Ezequiel Lasnier que realiza, junto con su novia, unas bicicletas rodado 12 para niños de 2 a 5 años hechas en madera artesanal con las cuales el niño, al no contar con pedales que lo propulsen, tiene que usar sus piernas para tomar envión y mantener el equilibrio. Según el folleto que reparte Ezequiel, estas bicicletas desarrollan la motricidad del niño, generan equilibrio y permiten el desarrollo de la confianza y la autonomía, además de ser de un material orgánico.
  La Expo contó con una feria orgánica; charlas explicativas sobre los productos de cada expositor; actividades lúdicas para niños: talleres de cocina, huerta biológica, talleres de reciclaje y energías renovables, música, teatro y títeres; la presencia de organismos oficiales como la Secretaría del Medio Ambiente y el  INTA, entre otros, vinculados al área de energías renovables, ambiente y sustentabilidad; ONGs, empresarios, dirigentes sociales, voluntariado social; también la participación de los artistas Adrián Berra y La Chilinga; multiplicidad de talleres; y charlas de concientización. 



 Zotalis, Melina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario